El famoso director y guionista, Tom DiCillo (Delirious/2006) acumuló una gran cantidad de material inédito del cantante fue filmada entre 1966 y 1971, el año trágico de su muerte, que arroja nuevas evidencias sobre una de las bandas más significativas que hubo en esa época.
En el documental se pueden apreciar filmaciones donde se muestran, entre otras cosas, el origen de la banda, los tiempos de estudiante de cine de Morrison en la Universidad de California y desconocidas filmaciones acerca de sus más importantes conciertos.
El director se vale de estas grabaciones y de la narración de Johhny Depp (Edward ScissorHands, Burton/1990) para armar un retrato simple y efectivo de un individuo preso de su propio simbolismo. Ensayos, lecturas poéticas y su contacto con los niños lo muestran como un tipo común y corriente que va entrando paulatinamente en territorios más oscuros.
Ray Manzarek, tecladista de la banda, afirmó que el filme “será la verdadera historia de los Doors”. Cabe señalar que ni él ni el guitarrista Robby Krieger y tampoco el baterista John Densmore entregan sus testimonios en el filme. Solamente las imágenes narradas por Depp amarran esta historia sencilla y reveladora de un gran mito que se niega a morir.
La cinta tuvo un exitoso estreno en el pasado Festival In-Edit y ha sido exhibido en certámenes como Sundance, Berlin, Londres y San Sebastián.
